Anémona del ermitaño (Calliactis parasitica)

Anémona del ermitaño
Calliactis parasitica (Couch, 1842)

En la Cala de La Rijana (Castell del Ferro)

Foto Julián Vinuesa, época motrileña (20/09/1998)

Reino: Animalia

Filo: Cnidaria

Clase: Anthozoa

 Orden: Actiniaria 

 Familia: Hormathiidae

Género: Calliactis parasitica

Esta anémona está compuesta por un tronco o columna con base adhesiva, disco pedio,  y tentáculos en la parte superior. Las dimensiones de la columna suelen ser de hasta 5 centímetros de diámetro del pie, 10 cm. de altura y hasta 3,5 cm. de de ancho de la placa bucal en la parte anterior. Externamente tiene una coloración pardo-amarillenta o grisácea con bandas longitudinales claras. Por otro lado, este animal puede presentar hasta 700 tentáculos de color pálido translúcido de 3 cm. de longitud dispuestos en 8 círculos alrededor de la placa bucal.

alimentación básicamente de pequeños organismos marinos o de otra materia orgánica, provista generalmente por el cangrejo con el que se asocia, el cual se encarga de capturar a las presas.

reproducción puede hacerlo asexualmente por división o sexualmente por producción de óvulos y espermatozoides.

hábitat acostumbra a frecuentar los sustratos rocosos y arenosos, normalmente sobre las conchas de moluscos gasterópodos ocupados por cangrejos ermitaños. Se ha registrado su presencia hasta profundidades de 200 metros, lo normal es encontrarlas hasta los 80 m. de profundidad.

distribución Mediterráneo, tanto Oriental como Occidental y en el Océano Adriático Oriental,  desde el Sur de Noruega al Golfo de Guinea.

curiosidades establece simbiosis mayoritariamente con el cangrejo ermitaño rojo Dardanus calidus o con Dardanus arrosor, aunque también puede asociarse a otros huéspedes del género Pagurus. De esta asociación, la anémona recibe alimento gracias al cangrejo y refugio en la concha del molusco que arrastra, mientras que el cangrejo recibe de la anémona protección frente al pulpo, depredador del cangrejo ermitaño. La asociación es tan íntima, que cuando el cangrejo decide cambiarse de concha, este pellizca el disco pedio de la anémona para extraerla y llevársela consigo en la mudanza.