domingo, 22 de enero de 2023

Aphis cytisorum

Entrada actualizada con fotos recientes 
de Pepe Marín

Aphis cytisorum (Hartig, 1841)
En el matorral de un bosque de encinas de Capileira
Foto AGMaldonado ( (23/06/2011)

En unas plantas de los márgenes de un sendero de la Vega de Motril 
Fotos Pepe Marín (19/05/2021) Identificación Nicolás Pérez, Biodiversidad Virtual
Sobre ramitas y flores de gayomba (Spartium junceum
En carril de Carretera al Puerto a Rambla Brujas
Foto Pepe Marín (27/04/2022) Identificación Nicolás Pérez, Biodiversidad Virtual
Sobre ramitas y flores de gayomba (Spartium junceum
En carril de Carretera al Puerto a Rambla Brujas
Foto Pepe Marín (28/04/2022) Identificación Nicolás Pérez, Biodiversidad Virtual
Sobre vaina de gayomba (Spartium junceum)
En Camino paralelo a Carretera Nacional con salida a Rambla Brujas, Motril
Foto Pepe Marín (06/06/2022) Identificación Nicolás Pérez, Biodiversidad Virtual

Reino: Animalia
Filo: Arthropoda
Clase: Insecta
Orden: Hemiptera
Familia: Aphididae
Género: Aphis
Especie: Aphis cytisorum 

Pulgón de color verde muy oscuro, puede aparecer grisáceo debido a una fuerte secreción de cera. Los sifúnculos (par de estructuras cónicas o tubulares con poros en sus extremos, situados posteriormente en la parte dorsal del abdomen) y la cauda (prolongación del abdomen) son oscuros, siendo los sifúnculos de 1,2 a 2,2 veces más largos que la cauda. Las antenas y las tibias son en su mayor parte pálidas.

Parasitan a plantas leguminosas (fabáceas) arbustivas y arbóreas. Se han citado sobre diversas especie de Cytisus (de ahí el nombre específico) Genista, Retama; Spartium junceum, etc. 

Las hormigas y pulgones establecen una relación beneficiosa para ambas especies, llamada simbiosisLas hormigas se sienten atraídas por los pulgones o áfidos que atacan a las plantas, y esta asociación entre pulgones y hormigas beneficia a ambas partes: los áfidos excretan una sustancia pegajosa (melaza) de la que se alimentan las hormigas, al mismo tiempo que estas protegen al pulgón de sus depredadores, por ejemplo las mariquitas. Por desgracia para la planta huésped la melaza estimula el crecimiento de moho. Los áfidos también chupan la savia de las plantas, lo que frena su crecimiento. Algunos áfidos pueden transmitir un virus que pueden tener un impacto devastador en cultivos como fresas, frambuesas, tomates y pepinos. Una de las mejores maneras de evitar el efecto de los áfidos es comprobar las plantas regularmente y podar las hojas que muestren signos de moho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario